La macadamia es un árbol frutal de porte pequeño (máximo hasta 5 metros de altura) que se ha puesto muy de moda últimamente debido a su conocido fruto: La nuez de macadamia.

Su nombre científico es Macadamia integrifolia y es el árbol frutal más moderno de los que se han descubierto.

El botánico Von Múller lo descubrió en Australia en el siglo XIX y lo bautizó con el nombre del naturalista y político australiano John Macadam.

Se trata de un árbol de hoja perenne que florece a finales de invierno y fructifica a principios de otoño.

La macadamia se ha de cultivar en climas cálidos libres de heladas y a pleno sol. Es muy resistente a la salinidad del mar y vive con muy poca agua.

Su fruto se compone de una semilla de grandes dimensiones envuelta en una cápsula de gran dureza (al igual que las nueces convencionales). Esta semilla puede llegar a tener hasta 3 cm. de diámetro.

La nuez de macadamia se caracteriza por su alto contenido en aceites (80%). También es muy rica en fibra, calcio, fósforo, hierro y vitamina B1.

Esta se puede consumir cruda, tostada o salada. Se utiliza mucho en reposteria y también (y debido a su alto contenido en aceites) en la elaboración de cosméticos.