El origen del nombre de raza no tiene que ver con el lugar original donde la raza se desarrolló, Etiopía (en otro tiempo Abisinia), sino por el hecho de que el primer «Abisinio» exhibido en una exposición en Inglaterra se trajo con la información de haber sido importado desde ese país.
Hacia finales del siglo XIX la raza ya era conocida y a principios del siglo XX catalogada. Los ingleses fueron quienes comenzaron con la cría sistemática de Abisinios y en un principio se ocuparon de refinarla. En 1909 llegó el primer Abisinio a los Estados Unidos importado de Inglaterra, así comenzó en Norteamérica la cría de la raza, que tardaría tiempo en dar resultados. Hacia fines de la década del 30’ fueron importados desde Inglaterra Abisinios de excelente calidad que fundaron la mayoría de los programas de cría americanos actuales.
El Gato Abisinio tiene el aspecto de un puma pero en miniatura. La evolución que ha tenido lugar durante todos estos siglos le ha otorgado características muy peculiares a su figura y a carácter. Tiene una figura estilizada y ágil, con un cuerpo musculoso. Tiene un cuerpo proporcionado y entre las razas de gatos un tamaño medio.
Hoy en día todas las asociaciones felinas del mundo reconocen esta raza y sus cuatro colores tradicionales (Ruddy, Sorrel, Blue, y Fawn), y algunas también en otros colores menos aceptados. Actualmente en todo el mundo los Abisinios constituyen una de las razas más populares en términos de registro de nacimientos y no pueden faltar en los espectáculos donde se pueden admirar ejemplares de excelente calidad.
Su carácter
Este gato tiene, como todos, un carácter único, una mezcla de ternura, curiosidad y fortaleza. Es un animal muy activo que nos exigirá constantemente atención y cariño. Es extremadamente limpio, excelente trepador y, por ser robusto, necesita ejercicio.
Se puede acostumbrar a vivir en un apartamento, siempre y cuando tenga libertad para moverse de una habitación a otra. Una terraza o un jardín son suficientes para que el gato pueda estirar sus patas, si fuera necesario. No le gusta mucho merodear, ni alejarse mucho, por lo que no se recomienda dejar salir este gato a la calle, pues es bastante asustadizo y puede perderse fácilmente al intentar huir de un ruido o situación extraña.
Cuidados
El Gato Abisinio es muy activo, y las hembras aún más. El Abisinio odia la soledad, y aunque necesita tiempo para descansar y hacer sus actividades siempre procura estar en la misma habitación que sus amos, que si no le hacen caso, en cualquier actividad, el gato ira a empujarles con su cabeza el brazo, pidiendo que lo mimen.
Le encanta curiosear por toda la casa y siempre está atento a los ruidos y al movimiento, es una raza perfecta para los concursos de agilidad, en los cuales participa con mucho éxito por todo el mundo. Le encanta saltar y trepar, por lo que es recomendable mantenerle las uñas cortas pues intenta frecuentemente subirse a los hombros de la gente o trepar por los muebles.
El Abisinio es muy inteligente, por lo que se puede entrenar fácilmente, siguiendo el método de premios y órdenes firmes con una seña particular. Puede sentarse, dar la mano, subir al hombro, pararse, trepar a un mueble, bajar del mismo, entre otras. A esta raza le encantan los retos y el entrenamiento es para él un juego más, una oportunidad para estrechar lazos. Sin embargo, ante las visitas puede ser reservado y mantener las distancias.
Este gato proviene de un cruce con un gato salvaje, por lo que su carácter puede, en algún momento, tornarse agresivo, sobre todo cuando es necesario reprenderlo y esto no se hace amablemente, por lo que es posible que intente atacarnos; en estos casos es necesario que primero se tranquilice y tome firmemente al gato, que se quedará quieto, en posición de sumisión, así le enseña quien manda, luego puede sostenerlo, acariciarlo y dejarlo ir.
En todo caso estamos ante una raza de gatos, el abisinio, muy apreciada en todo el mundo por sus buenas cualidades, su belleza e inteligencia.