Las peonías son unas plantas muy apreciadas por sus hermosas flores de colores. Los botánicos han descrito hasta más de 170 especies de peonías.
Es una de las plantas más apreciadas por los amantes de las plantas, llegando a ser objeto de colección por muchos de ellos.
El nombre de “peonía” viene en honor a Peón, conocido como el médico de los dioses en la mitología griega. Estas especies son nativas de Eurasia, especialmente de China, donde es una planta casi sagrada. Algunas son oriundas de América del Norte.
Se caracterizan por ser plantas herbáceas, o bien de porte arbustivo. La mayoría de sus especies son perennes, por lo que sus hojas no se caen en los tiempos invernales.
Presentan hojas pinnadas, alternas con un color verde, cuya tonalidad varía del claro a oscuro. Sus tallos tienen una corteza con colores variables, ya que pueden ser verdes, pardos levemente rojizos o incluso grisáceos.
El tamaño de las especies de peonías es variable; por ejemplo, las especies herbáceas rara vez llegan al metro de longitud, midiendo usualmente menos de 60 centímetros; mientras que aquellas especies de porte arbustivo pueden medir hasta 2 metros de altura.
Las flores de las peonías son solitarias, creciendo en los tallos terminales. En algunos casos, estas presentan un aroma característico.
Cuidados de las peonías
En general, las peonías son plantas sumamente resistentes, ya que su cuidado no afronta mayores dificultades, ni tampoco demanda mucho tiempo.
Sin embargo, si queremos que nuestras plantas prosperen sin preocupaciones y nos brinden de todo su atractivo hay que considerar ciertos cuidados:
Aunque se adaptan a cualquier tipo de suelos, se desarrollan mejor en aquellos con gran cantidad de materia orgánica. Igualmente, prefiere los terrenos ligeramente arcillosos para proliferar.
Si la queremos en maceta y si se adquieren ejemplares de especies arbustivas, se recomienda que esta sea profunda, con una profundidad mínima de 80 centímetros. Esto se debe a que posee un extenso sistema de raíces.
Además, conviene añadir una capa de piedrecillas o arcilla granulada en el fondo para facilitar la salida de agua.
El sol es un factor importante. No requieren sol directo, de hecho, les perjudica.
Requieren de mucha humedad de terreno para desarrollarse, riegos frecuentes, pero no excesivos, y se debe dejar escurrir bien la tierra.
Las podas se realizan en función del tipo de ejemplar. Si tenemos una especie arbustiva se debe hacer en el invierno; aunque se puede hacer conforme vaya creciendo para darle forma.
En Garden Catalunya Plants, a partir de febrero y durante buena parte de la primavera, disponemos de variedad de peonías de diferentes colores y tamaños.
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