Durante este mes empiezan a subir las temperaturas y las plantas vuelven a activarse.
El jardín se llena de vida, pero no debemos bajar la guardia, ya que las heladas tardías pueden provocar daños en los nuevos brotes que han aparecido con el aumento de las temperaturas.
Anuales, bianuales y vivaces
Se debe sembrar en plena tierra las plantas bianuales y vivaces que florecen al año siguiente así como repicar bien en cajones o en plena tierra las especies sembradas en febrero-marzo y que estén destinadas a la decoración de parterres y macizos durante el verano.
Se puede continuar la plantación de las vivaces cultivadas en maceta o que se hayan comprado.
Árboles y arbustos
Se puede continuar la plantación de árboles y arbustos de hoja persistente que hayan sido arrancados en cepellón, así como los de raíces carnosas sensibles a la humedad fría y en general todas las plantas procedentes de regiones cálidas o subtropicales.
Es el mejor momento para hacer los esquejes de árboles y arbustos de hoja persistente, que deben tener una consistencia semileñosa.
Los esquejes se deben colocar en cajoneras o campanas de plástico protegidas de la acción directa de los rayos solares y el viento, siendo necesario pulverizar las hojas dos o tres veces al día con una lluvia muy fina para mantener su turgencia y favorecer la formación de raíces.
A los árboles y arbustos jóvenes es necesario darles una poda de formación para aumentar su vegetación, eliminando al mismo tiempo todo el ramaje que se haya secado, bien con motivo del transplante, bien porque las escarchas hayan dañado las partes más tiernas.
Es igualmente necesario eliminar los botones florales en los rosales plantados este mismo año consiguiéndose así plantas más fuertes.
Una vez haya pasado la floración en árboles y arbustos de floración precoz hay que podarlos.
Durante la floración de los árboles y arbustos frutales, debemos eliminar todo tipo de labores y riegos, pues una labor mal dada y a destiempo puede poner en peligro la fructificación ocasionando una caída prematura de las flores o de los frutos recién formados.
Plantas de interior
A cada planta, su ración de agua
No por ser la mayoría de las especies de interior de origen tropical, hay que regarlas mucho. Cada una exige su propia ración de agua.
Por ello, así como los helechos, el Ficus pumila y los espatifilios, calateas, crotones y Fittonias necesitan un sustrato húmedo (si bien no todas en el mismo grado), la mayoría prefiere que entre riego y riego se deje secar el sustrato, entre ellas el Ficus benjamina y el gomero, las sansevierias, drácenas, aglaonemas, esparragueras y alocasias, la Dieffenbachia y palmeras como la Chamaedorea.
El exceso de agua provoca la aparición de enfermedades fúngicas, que se manifiestan como manchas en las hojas o podredumbre.
No dejes de darles humedad ambiental por medio de pulverizaciones: todas las plantas de interior la necesitan y la agradecen siempre.
Renuévales el sustrato
Las plantas de interior agradecerán una renovación al menos parcial del sustrato agotado para afrontar mejor estos meses de desarrollo.
Retira la capa superior de tierra (el grosor dependerá del tamaño del tiesto) con cuidado de no herir las raíces, y reemplázala por un sustrato para plantas de interior. Riega a continuación.
Si han crecido demasiado…
Si el gomero o la drácena se han hecho demasiado altos, dales un buen corte a media altura. La planta originaria emitirá nuevos brotes.
Pon en agua el extremo cortado, o úntalo con hormonas de arraigo y entiérralo en una mezcla húmeda de arena y humus, hasta que eche raíces.
Césped
Durante el mes de Abril debemos de realizar los trabajos necesarios para preparar nuestro césped para el verano. Os dejamos unos consejos para que podáis disfrutar de un césped sano y vigoroso este verano.
En este mes, generalmente el césped experimenta una recuperación natural debido a la subida de las temperaturas propias de las fechas.
Suele presentar por tanto un buen aspecto. Pero debemos prepararlo para la temporada veraniega, donde las altas temperaturas, y el mayor desgaste por el uso, pueden pasarle factura.
En este mes es normal hacer al menos 2-3 siegas, por lo que interesa tener la máquina a punto, y con las cuchillas bien afiladas.
La frecuencia y dosis de los riegos variará sensiblemente en función de la zona que se trate, pero en general, hay que pensar que para este mes, el riego debe estar ya en funcionamiento, y al menos se deben dar del orden de 2-3 riegos semanales.